Mercedes y Red Bull sorpreden una vez más homologando un nuevo chasis para esta temporada
Mercedes y Red Bull dan otra vuelta de tuerca y demuestran su poderío en innovación creando un nuevo chasis con muchas mejoras y con vistas a la próxima temporada, pero que será introducido en breve en sus monoplazas.
Si algo ha caracterizado a Mercedes estos últimos años de triunfos en la Fórmula 1 es el trabajo constante y silencioso, pero siempre efectivo, y la continua búsqueda de la perfección. Incluso liderando la tabla con tanta solvencia y durante tanto tiempo, siempre están buscando puntos en los que mejorar y ser los primeros en dar el siguiente paso.
Una vez más, se han adelantado al resto de la parrilla. Ante el miedo que supone la reciente mejoría de Red Bull, el equipo de la estrella confirmaba ayer que un nuevo chasis para su monoplaza W10 de esta temporada acaba de pasar los Crash Test de la FIA.
Al parecer, se trata de una evolución importante del chasis de este año, estudiado y preparado para producir una mejora sustancial desde su implantación esta temporada, y por otro lado, con innovaciones pensadas para introducir de inicio en la próxima temporada.
A simple vista esos cambios no parece que vayan a ser apreciables, pero se prevé que las medidas tengan un efecto positivo inmediato en la velocidad y el comportamiento del coche. Estas mejoras estarían orientadas principalmente a la reducción de peso, debido a que su monoplaza, al ser uno de los que tiene mayor distancia entre ejes, también es uno de los más pesados de la parrilla.
No obstante, es importante destacar que, el equipo alemán no se plantea de momento introducir este nuevo chasis ya desde el Gran Premio de Alemania. Lo más probable es que se introduzca después del parón veraniego. Cada equipo suele homologar cinco chasis distintos por temporada.
Sin embargo, no han sido los únicos en dar la sorpresa. El otro equipo con tendencia muy positiva, Red Bull, responde con la misma moneda y anuncia también que un nuevo chasis había pasado los Crash Test de la FIA.
La victoria en Austria y el que habría sido el pódium de Verstappen de no ser por el choque de Vettel dejan claro que el equipo austríaco está mejorando su monoplaza a marchas forzadas. Desde el inicio de temporada, han dedicado muchos esfuerzos para mejorar la suspensión delantera y la degradación de los neumáticos. El nuevo chasis promete sentar una base sólida sobre esas áreas de cara a final de temporada y a la próxima campaña. Con la ayuda de Honda, quien ha mejorado mucho en potencia, fiabilidad y consumo, como ya se ha demostrado en los últimos Grandes Premios, buscan superar a Ferrari y dar el salto definitivo para alcanzar a Mercedes y pelear con ellos por el próximo Campeonato del Mundo.