La Fórmula 1 ha roto el acuerdo que la acercaba a Rusia, de modo que, de manera inminente, el Gran Premio de Rusia causará baja en el calendario de la máxima categoría. El conflicto armado que azota a Ucrania, y tiene en vilo al mundo entero, ha desencadenado una serie de decisiones que afectan al deporte del país. El proyecto ruso de futuro en el calendario de la F1 está cancelado.

La guerra entre Rusia y Ucrania empieza a tener consecuencias muy negativas para el país euroasiático. Además de las penalizaciones económicas, que están determinando una inestabilidad a la bolsa y economía del país, existen sanciones a nivel deportivo.

Expulsados del Mundial de Qatar de este año y excluidos de los Juegos Paralímpicos de Invierno 2022, equipos eliminados de la UEFA Europa League (Spartak Moscú), alejados de la Copa Davis de tenis... y, entre tantas más, la prohibición de participación deportiva bajo bandera rusa (o bielorrusa).

Llegados a la Fórmula 1, esta última regla ya estaba vigente, a raíz de los casos de dopaje en deportistas rusos. Es por ello que Nikita Mazepin, piloto ruso del equipo Haas F1, disputó la campaña pasada bajo bandera neutra “RAF” (Russian Automobile Federation - Federación Rusa del Automóvil). Esto mismo sucedería esta campaña, por lo que pilotos en campeonatos FIA disputarían su respectiva temporada bajo bandera neutra: casos como el de Alexander Smolyar, piloto de MP Motorsport en Fórmula 3, el propio Mazepin, o Robert Shwartzman (Ferrari) o Daniil Kvyat (Alpine) si llegasen a disputar algún GP a lo largo del año (suplencia, COVID, etc).

Sin embargo, y más en el caso del debutante de 2021, no es el principal problema para que siga corriendo en la máxima categoría. Y es que las disputas económicas llevaron a que grandes empresas mundiales rompan acuerdos con casas rusas, y es el caso del equipo Haas.

Si bien es propiedad del estadounidense Gene Haas, quien da nombre al mismo, desde 2021 llegó la fuerte inversión de Uralkali, empresa rusa propiedad de Dmitri Mazepin, padre del piloto. Esto hizo posible la llegada del número 9 a la parrilla, y la representación gráfica, literal, de los colores rusos sobre el monoplaza americano. Ni el mejor de los cuentos te plantea esto.

No obstante, con estas restricciones, la colaboración Uralkali-Haas se hace impensable, por lo que todo puede caerse para el joven corredor. Ya se pudo ver el “fin” de esta cooperación en la última jornada de test en Barcelona, en la que el VF-22 corrió con una livery completamente blanca. Ahora mismo, su asiento está en el aire, y tiene todas las papeletas para quedarse fuera de la parrilla, con Pietro Fittipaldi en la ‘pole’ para suplirlo.

Volviendo al Gran Premio, este abrupto final termina lo que, como norma general, ha sido considerado un suplicio. El Autódromo de Sochi no supuso, salvo en su última edición (2021), un escenario de buenas carreras. La complicación para adelantar, agravada con la nueva generación de coches, hacía improbable tener demasiada buena acción.

Su criticado último sector, repleto de curvas de 90º, hacía prácticamente imposible que se pudiese salir pegado al coche de delante, y quedarse en disposición de adelantar. La larga recta, de más de un kilómetro, muchas veces se quedaba corta. Todo esto, sumado finalmente, hacía que se tratase de un GP poco atractivo, sin esa magia que pudiesen tener otros eventos, como lo vivido en Silverstone, Zandvoort, Monza o México, entre otros.

Si bien es cierto que Sochi sería el “gran perdedor” de todo esto, se había confirmado un proyecto de circuito en San Petersburgo, el Igora Drive, para ser la sede del evento ruso a partir de 2023. ¡Ya confirmado! Todo esto echado a perder.

BREAKING: The Russian Grand Prix will move to the Autodrom Igora Drive in St Petersburg from 2023#F1 pic.twitter.com/O3vcfbWf7t

— Formula 1 (@F1) June 26, 2021

Miles son las consecuencias de un conflicto geopolítico. El fanático del deporte, al igual que los que estamos involucrados en esto, nos gustaría que fuese tan fácil como “no mezclar deporte y política”.

La triste realidad es que un país, que está destruyendo todo a su paso, cobrándose cientos y cientos de vidas de inocentes, va a sufrir un montón de sanciones, económicas, impositivas y de toda índole. Estas son algunas de ellas: no hay Gran Premio (en un futuro), y los pilotos...a correr “con pinzas”. Esperemos que todo esto termine pronto.

F1 | ¿Que sucedió específicamente con las nuevas llantas Pirelli de 18 pulgadas en Montmeló?